El otro día vi una película muy interesante donde se podía apreciar claramente como afecta la motivación en las personas. Se trata de una película basada en una realidad creada por uno de los personajes, que vive según y para esa fantasía.
Un personaje que sigue el curso que le mandan unos estándares y posición social. Que vive la vida según lo que los demás esperan de él y que no es capaz de enfrentarse a una realidad en la que ni siquiera puede cubrir sus necesidades básicas.
Según las teorías cognitivas de la motivación los seres humanos percibimos la realidad o los acontecimientos del entorno, éstos son procesados por el sistema nervioso central, y según el significado que le hayamos dado creamos nuestros planes o expectativas, dando lugar a fenómenos motivacionales que producirán una serie de consecuencias que se unirán al flujo del procesamiento de la información y que formaría la regulación cognitiva de la conducta.
Según Miller “los seres humanos tienen representaciones cognitivas ideales de sus conductas, los objetos del entorno y de los acontecimientos”. Así, cuando el estado actual de la persona no coincide con el ideal se produce una incongruencia de naturaleza motivacional que hará que se intente corregir a través de la toma de decisiones hasta el estado ideal.
En el caso de nuestro personaje parece ser que percibe o procesa esa realidad de una manera que no genera ningún tipo de incongruencia, siendo el estado ideal el actual, luego, no realiza acción alguna para cambiar esta situación, no tiene motivación.
Pero este mundo se ve alterado por un factor o estímulo externo que hace que su estabilidad (estado ideal=estado actual) se vea alterada, una joven estudiante de la que se enamora, una motivación inconsciente. Y nuevamente crea una mentira para obtener unos objetivos, pero que, en este caso se verán frustrados, ocasionando una alteración en la conducta, un desequilibrio, un desajuste en el comportamiento que lo llevarán al suicidio, e incluso, a plantearse el matar a su hijo para que no pierda su admiración por él.
En esa vida imaginaría nuestro personaje se encuentra en el tramo más alto de la pirámide de Maslow, con un buen trabajo que cubre sus necesidades primarias o fisiológicas, con un entorno equilibrado que le da seguridad, una familia que le trasmite constantemente su afectividad, un reconocimiento social y estima y por último la auto-realización, en la que según su realidad, sigue consiguiendo logros.
El hecho de que nuestro personaje viva mentira tras mentira se explicaría según el psicólogo B. F. Skinner con la teoría del reforzamiento que le da un enfoque a la motivación como la ley del efecto, una conducta con resultados positivos se tiende a repetir, sus mentiras eran aceptadas y le cubrían sus necesidades en todas las escalas, por lo tanto en cuanto tenía carencias tanto fisiológicas como sociales o afectivas, recurría a un nuevo engaño (nuevo ascenso, nuevos reconocimientos en el trabajo, etc.) esperando que arrojaran resultados positivos.
Podemos encontrar muchas definiciones de motivación. Así, para Stoner, son “los factores que ocasionan, canalizan y sustentan la conducta humana en un sentido particular y comprometido”. Para Solana “La motivación es, en síntesis, lo que hace que un individuo actué y se comporte de una determinada manera. Es una combinación de procesos intelectuales, fisiológicos y psicológicos que decide, en una situación dada, con qué vigor actúa y en qué dirección se encauza la energía”, hay gran diversidad de definiciones sobre la motivación pero todas parecen coincidir en que “La motivación es un proceso o una combinación de procesos que consiste en influir de alguna manera en la conducta de las personas”.
Un personaje que sigue el curso que le mandan unos estándares y posición social. Que vive la vida según lo que los demás esperan de él y que no es capaz de enfrentarse a una realidad en la que ni siquiera puede cubrir sus necesidades básicas.
Según las teorías cognitivas de la motivación los seres humanos percibimos la realidad o los acontecimientos del entorno, éstos son procesados por el sistema nervioso central, y según el significado que le hayamos dado creamos nuestros planes o expectativas, dando lugar a fenómenos motivacionales que producirán una serie de consecuencias que se unirán al flujo del procesamiento de la información y que formaría la regulación cognitiva de la conducta.
Según Miller “los seres humanos tienen representaciones cognitivas ideales de sus conductas, los objetos del entorno y de los acontecimientos”. Así, cuando el estado actual de la persona no coincide con el ideal se produce una incongruencia de naturaleza motivacional que hará que se intente corregir a través de la toma de decisiones hasta el estado ideal.
En el caso de nuestro personaje parece ser que percibe o procesa esa realidad de una manera que no genera ningún tipo de incongruencia, siendo el estado ideal el actual, luego, no realiza acción alguna para cambiar esta situación, no tiene motivación.
Pero este mundo se ve alterado por un factor o estímulo externo que hace que su estabilidad (estado ideal=estado actual) se vea alterada, una joven estudiante de la que se enamora, una motivación inconsciente. Y nuevamente crea una mentira para obtener unos objetivos, pero que, en este caso se verán frustrados, ocasionando una alteración en la conducta, un desequilibrio, un desajuste en el comportamiento que lo llevarán al suicidio, e incluso, a plantearse el matar a su hijo para que no pierda su admiración por él.
En esa vida imaginaría nuestro personaje se encuentra en el tramo más alto de la pirámide de Maslow, con un buen trabajo que cubre sus necesidades primarias o fisiológicas, con un entorno equilibrado que le da seguridad, una familia que le trasmite constantemente su afectividad, un reconocimiento social y estima y por último la auto-realización, en la que según su realidad, sigue consiguiendo logros.
El hecho de que nuestro personaje viva mentira tras mentira se explicaría según el psicólogo B. F. Skinner con la teoría del reforzamiento que le da un enfoque a la motivación como la ley del efecto, una conducta con resultados positivos se tiende a repetir, sus mentiras eran aceptadas y le cubrían sus necesidades en todas las escalas, por lo tanto en cuanto tenía carencias tanto fisiológicas como sociales o afectivas, recurría a un nuevo engaño (nuevo ascenso, nuevos reconocimientos en el trabajo, etc.) esperando que arrojaran resultados positivos.
Podemos encontrar muchas definiciones de motivación. Así, para Stoner, son “los factores que ocasionan, canalizan y sustentan la conducta humana en un sentido particular y comprometido”. Para Solana “La motivación es, en síntesis, lo que hace que un individuo actué y se comporte de una determinada manera. Es una combinación de procesos intelectuales, fisiológicos y psicológicos que decide, en una situación dada, con qué vigor actúa y en qué dirección se encauza la energía”, hay gran diversidad de definiciones sobre la motivación pero todas parecen coincidir en que “La motivación es un proceso o una combinación de procesos que consiste en influir de alguna manera en la conducta de las personas”.
